sábado, diciembre 15, 2007

*fotografia tomada por Teleoalrevès*

Las ventanas no se esconden de las cortinas, y el cielo se abre adentro de un cable compañero de palomas. Las tardecitas en Buenos Aires vienen siendo con los llantos de algùn niño vecino entre dientes de estreno y los gritos-aullidos del loro del fondo. hay tres hojas de mi àrbol que se mueven despacito, y yo aprovecho la lejanìa del rìo para respirar hondo, pensarte y descubrir que la distancia todavìa no sabe que vos y yo nos queremos.

8 comentarios:

Miguel Rodríguez dijo...

qué hay en tu mundo que resulta irrespirable?

JUANAN URKIJO dijo...

Pintas un paisaje aparentemente cotidiano para el amor, sin embargo plagado de pequeños matices que lo ensalzan y embellecen sobre lo anodino de la escena.
Me ha gustado leerte; me he sentido un poco a tu lado, en esa "tardecita" de tu Buenos Aires.

Un beso, bien plantado.

Olivia dijo...

Cuando viva momentos en b.aires
recordaré tus tres hojas
y la distancia sorda
del nosotros.

BLQ dijo...

al leer el párrafo que compartes, me acerqué al pequeño balcón que tiene la habitación desde donde escribo... debes tener suerte que ahora en Buenos Aires hace calor, probablmente. En Grenoble hace frío, ya es oscuro y por una calle estrecha, pues es la parte antigua de la ciudad, solo observo como la gente toma el café dentro del bar que hay delante del piso y una pareja casi correr, pero no ditingo sus caras, pues van tapados de arriba abajo. No apetece salir...

Anónimo dijo...

A la distancia hay que ganarle una partida de truco y ya.

lazzio dijo...

está buena la foto
tabueno el blog

Unknown dijo...

feliz todo
queridisima

devil2000 dijo...

hola me gusta mucho tu blog , me parece bastante interesante, te quiero confesar que algunos de tus articulos los he publicado en el mio y ademas invitarte a participar en un foro que pretendo organizar en mi blog, te dejo el link y un enorme saludo!!

http://thexcorner.blogspot.com/2008/01/1-foro-abierto-thexcorner.html